Perú: Máxima Acuña Premio Goldman 2016
Fuente: Goldman Prize
Máxima Acuña de Chaupe ha sido galardonada con el Premio Goldman Centroamérica y Sudamérica 2016 en reconocimiento de su lucha en defensa del medio ambiente.
Máxima es conocida por su enfrentamiento con la compañía minera Newmont por una concesión de extracción de oro en un área que afecta a la finca de su propiedad, donde vive con su familia y cultiva sus tierras, junto a la Laguna Azul.
El proyecto minero Conga en Tragadero Grande, de Newmont, usaría como depósito de desechos dicha laguna. El conflicto con la empresa la ha llevado a varios litigios legales y a ser víctima, con su familia, de graves agresiones, acoso e intimidaciones. Y por todo ello se ha convertido en un símbolo de resistencia en la defensa del medio ambiento frente al extractivismo. Justamente el pasado 8 de abril la Oficina Nacional de Gobierno Interior (ONAGI) le acaba de otorgar medidas cautelares para su protección.
Fuente: Goldman Prize
Máxima Acuña, agricultora de subsistencia de la sierra norte del Perú, exitosamente defendió su derecho a vivir en paz y vivir de su propio terreno, un terreno codiciado por las empresas mineras Newmont y Buenaventura, impidiendo la entrada de la mina de oro y cobre, el Proyecto Conga, a una cuenca importante.
Los conflictos por la minería en el Perú
Durante las últimas dos décadas, la industria minera en el Perú ha estado creciendo a un paso veloz. Tras promesas de empleos y prosperidad económica, el gobierno peruano ha dado concesiones mineras a lo largo de todo el país. A pesar de estas promesas, los campesinos rurales, a quienes rara vez se les consultó en el desarrollo de los proyectos mineros, siguen viviendo en la pobreza. En muchas comunidades los resíduos mineros han contaminado las vías pluviales, afectando el agua potable y las necesidades de riego de las comunidades locales.
En la sierra norte de Perú, en Cajamarca, donde se ha entregado casi la mitad del terreno en concesiones mineras, la empresa Newmont, de Colorado, EE.UU, junto con la minera peruana, Buenaventura, operan la mina Yanacocha. Es una de las minas de oro y cobre a cielo abierto más grandes del mundo- y en su apogeo una de las más rentables.
Mientras la empresa agotaba los depósitos de la mina, empezó a buscar otras opciones para aumentar la producción. En el 2011, propuso otra mina para extraer un yacimiento de oro que se acababa de descubrir a unos 16 kilómetros de Yanacocha. El proyecto, denominado Proyecto Conga, requería el trasvase de cuatro lagunas cercanas. Una de ellas, conocida como la Laguna Azul, sería convertida en fosa para el almacenamiento de residuos, amenazando las cabeceras de cinco cuencas y el páramo de Cajamarca, un humedal de altura con mucha diversidad biológica.
Una vida pacífica, interrumpida
En 1994, Máxima Acuña y su esposo compraron un terreno en un rincón apartado de las tierras altas en el norte del Perú conocido como Tragadero Grande. Construyeron una pequeña casa en la propiedad y vivieron una vida pacífica, criando ahí a sus hijos. La familia vivía de las papas y otros cultivos, y además tenían ovejas y vacas para la leche y el queso. A veces, Acuña hacía el largo trayecto al pueblo para vender vegetales, alimentos lácteos y artesanías de lana. Nunca había aprendido a leer y escribir, pero sabía que la tierra era su vida.
Un día de 2011, la empresa minera llegó a la finca y exigió que dejaran el terreno. Cuando Máxima se negó, fue sometida a la brutalidad de la minera. Llegaron fuerzas armadas a destruir su hogar y pertenencias, y la golpearon a ella y a una de sus hijas hasta dejarlas inconscientes.
La persecución continuó. La empresa minera demandó a la familia campesina en una corte de provincia, la cual encontró culpable a la familia de ocupar ilegalmente su propio terreno. Acuña fue condenada a una pena de prisión de casi tres años, la cual fue suspendida, y recibió una multa de casi $2,000—una suma enorme para una agricultora de subsistencia en el Perú.
Traumatizada, sin hogar, y aun así, resuelta
Acuña pidió la ayuda legal de GRUFIDES, una ONG ambiental en Cajamarca que estaba representando a miembros de la comunidad en casos contra compañías mineras. Con la ayuda de su abogado, Mirtha Vásquez, apeló la decisión de la corte y empezó a reunir documentos como el título de propiedad que comprobaba que ella tenía derecho legítimo al terreno que reclamaba Newmont.
En diciembre del 2014, las cortes emitieron un fallo a su favor. Su condena de prisión fue anulada y la corte detuvo su desalojo. Como resultado de esta victoria legal, se ha impedido el ingreso del Proyecto Conga en Tragadero Grande. Newmont no ha podido seguir adelante con ninguna minería en la región alrededor de la Laguna Azul.
Acuña sigue enfrentándose a las amenazas y al hostigamiento por parte la minera y sus fuerzas de seguridad privada y militarizada. Las compañías mineras han construido un cerco alrededor del terreno de Acuña, restringiendo su capacidad de desplazarse libremente en la región. Han destruido sus cultivos de papa, y mantienen una estrecha vigilancia sobre su propiedad para impedir que ella siembre más.
Mientras tanto, en la Corte Suprema de Perú, se sigue dando la lucha legal, la cual seguramente dará paso a más apelaciones y demandas. A pesar del trauma y el cansancio, Acuña mantiene un notable optimismo en su lucha continua por la justicia. Se ha vuelto una persona muy conocida a lo largo de América Latina por su valentía inspiradora al enfrentarse a una compañía minera multinacional. El Proyecto Conga no ha avanzado. La comunidad se ha solidarizado con Máxima y su logro ha traído nueva vida a la lucha para defender los páramos de Cajamarca, reservas de agua, y las comunidades de los impactos de la minería de oro de gran escala.
Información acerca del Premio Ambiental Goldman
El Premio Ambiental Goldman premia y da reconocimiento a individuos emprendiendo luchas para ganar victorias ambientales contra viento y marea, e inspira a las personas a tomar acciones extraordinarias para proteger los recursos naturales del mundo. El Premio Ambiental Goldman fue creado en 1989 por Richard N. Goldman y su esposa Rhoda H. Goldman, ambos filántropos y líderes cívicos.
Los ganadores del Premio Ambiental Goldman son seleccionados por un jurado internacional que elige a los galardonados a partir de nominaciones confidenciales hechas por una red mundial de individuos y organizaciones ambientales. Los ganadores del premio hacen una gira de 10 días en San Francisco y Washington, D.C., participando en una ceremonia de entrega de premios, en conferencias y sesiones informativas de prensa, y en reuniones con líderes políticos y líderes ambientales y de políticas públicas.
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Màxima Acuña, Premi Goldman 2016
Màxima Acuña, agricultora de subsistència de la serra nord del Perú, defensa el seu dret a viure en pau i viure del seu propi terreny, un terreny cobejat per les empreses mineres Newmont i Buenaventura, impedint l'entrada de la mina d'or i coure, el Projecte Conga, a una conca important.
Els conflictes per la mineria al Perú
Durant les últimes dues dècades, la indústria minera al Perú ha estat creixent a gran velocitat. Amb promeses de llocs de treball i prosperitat econòmica, el govern peruà ha atorgat concessions mineres al llarg de tot el país. Malgrat aquestes promeses, els camperols rurals, als que poques vegades se'ls ha consultat en el desenvolupament dels projectes miners, segueixen vivint en la pobresa. A moltes comunitats els residus miners han contaminat les vies pluvials, afectant l'aigua potable i les necessitats de reg de les comunitats locals.
A la serra nord del Perú, a Cajamarca, on s'ha lliurat gairebé la meitat del terreny a concessions mineres, l'empresa Newmont, de Colorado, EUA, juntament amb la minera peruana, Bonaventura, operen la mina Yanacocha. És una de les mines d'or i coure a cel obert més grans del món- i en el seu apogeu una de les més rendibles.
Mentre l'empresa esgotava els dipòsits de la mina, va començar a buscar altres opcions per augmentar producció. El 2011, va proposar una altra mina per extreure un dipòsit d'or que s'acabava de descobrir a uns 16 quilòmetres de Yanacocha. El projecte, denominat Projecte Conga, requeria el transvasament de quatre llacunes properes, una d'elles, coneguda com la Llacuna Blava, seria convertida en fossa per a l'emmagatzematge de residus, amenaçant les capçaleres de cinc conques i l'erm de Cajamarca, un aiguamoll de alçada amb molta diversitat biològica.
Una vida pacífica, interrompuda
El 1994, Màxima Acuña i el seu marit van comprar un terreny en un racó apartat de les terres altes al nord del Perú conegut com Tragadero Grande. Van construir una petita casa a la propietat i van viure una vida pacífica, criant aquí als seus fills. La família vivia de les papes i altres cultius, i a més tenien ovelles i vaques per a la llet i el formatge. De vegades, Acuña feia el llarg trajecte al poble per vendre vegetals, aliments lactis i artesanies de llana. Mai havia après a llegir i escriure, però sabia que la terra era la seva vida.
Un dia de 2011, l'empresa minera va arribar a les seves terres exigint que les deixessin. Quan Máxima es va negar, va ser sotmesa a la brutalitat de la minera. Van arribar forces armades a destruir la seva llar i pertinences, i la van copejar a ella i una de les seves filles fins deixar-les inconscients.
La persecució va continuar. L'empresa minera va demandar a la família pagesa a un tribunal de província, el qual va trobar culpable a la família d'ocupar il·legalment el seu propi terreny. Acuña va ser condemnada a una pena de presó de gairebé tres anys, la qual va ser suspesa, i va rebre una multa de gairebé 2.000 $, una suma enorme per a una agricultora de subsistència al Perú.
Traumatitzada, sense llar, i tot i així, resolta
Acuña va demanar l'ajuda legal de GRUFIDES, una ONG ambiental a Cajamarca que estava representant a membres de la comunitat en casos contra companyies mineres. Amb l'ajuda de la seva advocadessa, Mirtha Vásquez, va apel·lar la decisió de la cort i va començar a reunir documents com el títol de propietat que comprovava que ella tenia dret legítim al terreny que reclamava Newmont.
Al desembre del 2014, el nou tribunal van fallar a favor seu. La seva condemna de presó va ser anul·lada i es va detenir el seu desallotjament. Com a resultat d'aquesta victòria legal, s'ha impedit l'ingrés del Projecte Conga de Tragadero Grande. Newmont no ha pogut seguir endavant amb cap activitat minera a la regió al voltant de la Llacuna Blava.
Acuña segueix enfrontant-se a les amenaces i la fustigació per part la minera i les seves forces de seguretat privada i militaritzada. Les companyies mineres han construït un cèrcol al voltant del terreny d'Acuña, restringint la seva capacitat de desplaçar-se lliurement a la regió. Han destruït els seus cultius de papa, i mantenen una estreta vigilància sobre la seva propietat per impedir que sembri més.
Mentrestant, a la Cort Suprema del Perú, se segueix donant la lluita legal, la qual segurament donarà pas a més apel·lacions i demandes. Malgrat el trauma i el cansament, Acuña manté un notable optimisme en la seva lluita contínua per la justícia.
S'ha tornat una persona molt coneguda a tota Amèrica Llatina per la seva valentia inspiradora a enfrontar-se a una companyia minera multinacional. El Projecte Conga no ha avançat. La comunitat s'ha solidaritzat amb Màxima i el seu èxit ha portat nova vida a la lluita per defensar els erms de Cajamarca, reserves d'aigua, i les comunitats dels impactes de la mineria d'or de gran escala.
Informació sobre el Premi Ambiental Goldman
El Premi Ambiental Goldman premia i dóna reconeixement a individus emprenent lluites per guanyar victòries ambientals contra vent i marea, i inspira a les persones a prendre accions extraordinàries per protegir els recursos naturals del món. El Premi Ambiental Goldman va ser creat el 1989 per Richard N. Goldman i la seva dona Rhoda H. Goldman, tots dos filantrops i líders cívics.
Els guanyadors del Premi Ambiental Goldman són seleccionats per un jurat internacional que tria els guardonats a partir de nominacions confidencials fetes per una xarxa mundial d'individus i organitzacions ambientals. Els guanyadors del premi fan una gira de 10 dies a San Francisco i Washington, D.C., participant en una cerimònia de lliurament de premis, en conferències i sessions informatives de premsa, i en reunions amb líders polítics i líders ambientals i de polítiques públiques.
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